La gente habla, la mayoría de las veces sin saber de lo que hablan, te llegan rumores, en otras ocasiones tú eres la protagonista de esos rumores. Rumores que no te hacen ni puta gracia, le gente es cruel y más si todo te va "bien" en la vida. Surgen las envidias, los comentarios, las habladurías. Mucha gente dice que hay que pasar, ser fuerte, a palabras necias oídos sordos, no?
Pues sabéis qué? Yo no lo creo así, intentas ser fuerte pero cuanto más lo intentas más crueles son los comentarios, más gilipollas se vuelve la gente. Y vale, ahora tenemos una edad en la que podemos fingir que nada nos importa, que no nos afecta. Pero cuando eres pequeña no tienes forma de ocultarlo, siempre son unas cuantas contra ti, y casualidad que siempre que se meten contigo estás tú sola. No puedes hacer nada. Llegas a casa y lloras, piensas que no llegarás a ser nadie en la vida, que son superiores a ti, que no vales nada.
Pero entonces es cuando van pasando los años y la vida va colocando a cada uno en su sitio. Miras atrás y piensas: ¿Cómo pudieron hacerme tanto daño?
Ahora eres fuerte, gracias a ellas te has hecho mucho más fuerte, ahora a nada que te ataquen ya no rompes a llorar, y es que lo que no te mata te hace más fuerte. La gente es injusta y mucho más si eres débil y no te enfrentas a ellos. Pero los años pasan, la vida sigue y llegará un momento en el que te reirás de que ellos no han llegado a ser nadie y que tú has triunfado y has conseguido ser alguien que se siente orgulloso de sí mismo a pesar de todo lo que ha pasado.
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